En tiempos como los que vivimos actualmente es más que necesario enviarle al cerebro indicaciones para sentirnos bien. No obstante, el solo hecho de cambiar de rutina, de escuchar noticias negativas que nos agobian todos el día y de no poder salir, tienden a provocarnos falta de ganas de levantarnos y de continuar.
Y aunque queramos, hay cosas que no podemos cambiar, lo cierto es que lo único que podemos modificar es nuestra actitud. Deberíamos entonces pensar en esto y preguntarnos ¿Cómo quiero llevar esta situación? ¿En cama todos los días, en pijama y sin bañarme? o bien ¿Fresco, radiante, con ánimo y buena actitud? Se trata de vestirnos con el traje del éxito y no del fracaso. Investigadores de la Universidad de Nortwestern determinaron que la ropa tiene un efecto psicológico y de comportamiento en las personas, esto a su vez puede convertirse en nuestra terapia en estos días de confinamiento.
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La imagen por lo tanto es una de las herramientas que tenemos a la mano, que no nos generará gastos y que nos ayudará a sentirnos mejor. Si en esta época tenemos que trabajar desde casa, vestirse con prendas que nos motiven es la clave. Escoger una prenda que nos haga felices, que nos recuerde alguna vivencia bonita o que nos hagan lucir bien, nos ayudará a sentirnos mucho mejor.
Consecuencias de quedarnos todo el día en pijamas
La mente es muy poderosa, si le enviamos mensajes de que estamos bien así empezaremos a sentirnos, de lo contrario lo más triste puede empezar a suceder. Si decides no bañarte y quedarte en pijamas todo el día podrías acarrear los siguientes problemas:
1. Tu capacidad empezará a disminuir.
2. Si usas ropa como las pijamas, tu mente empezará a sentir demasiada comodidad y por lo tanto, no tendrás ganas de trabajar.
3. Las personas que trabajan desde casa desde hace mucho tiempo saben que quedarse en pijamas no fomenta la concentración.
4. Serás menos productivo y eficiente.
5. Bajará tu autoestima.
Decide bañarte, arreglar tu cabello y ponerte un labial. Escoge la blusa más colorida y la que tenga el estampado más divertido. Elige ser luz, y no oscuridad. No se trata de vestirse de gala, sino de escoger una prenda que te haga sentir más confiada y feliz. Recuerda que dejarse la pijama todo el día es como no abrir las ventanas de la casa, probablemente nunca entre el sol.