6 claves para transmitir seguridad

Cuando inicio un proceso de asesoría con un cliente mi primera pregunta durante la entrevista es ¿Qué te gustaría conseguir con esta asesoría? ¿Cómo te gustaría ser percibido? En muchos de los casos, su respuesta es: “…deseo transmitir seguridad.”

Esta palabra abarca distintos significados, pero para todos su enfoque es el mismo. Cuantas veces has ido a un lugar y la ropa te hace sentir incómodo, afloran las preguntas como: ¿Estaré bien vestido? ¿Estaré acorde al evento? ¿Me lucirá bien? Sin embargo, desgastarnos tanto en este tema por supuesto que además de hacernos sentir incómodos, nos hará sentir inseguros.

Esto se maximiza si ese día lo que tengo es una presentación, una incorporación, defender una tesis o una entrevista. En medio está la ansiedad de obtener aceptación y por eso la ropa no puede ser un factor que distraiga nuestro objetivo sino más bien, debería ser un aliado que nos ayude a alcanzar la meta sin tener que decir una sola palabra.

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¿Cómo enviar los estímulos correctos?

Cada producción que hagamos con nuestro vestuario puede arrojar sensaciones distintas, que son interpretadas por el espectador según cada producción. Es decir, si el vestuario que llevamos evoca estímulos positivos y de poder, es muy probable que eso me haga sentir seguro y además que los otros entiendan el mensaje de esa misma manera.  Valdría preguntarnos, ¿cómo puedo hacer para que esto ocurra? La respuesta es sencilla. Tomá nota de los siguientes puntos, y lográ transmitir seguridad a través del vestuario:

1. Si la ropa te incomoda no la usés. Ese es el primer aviso de que algo no anda bien, si eso te ocurre con la  mayoría de la ropa probablemente haya  un problema más profundo de identidad.
2. Usá el color de forma balanceada. Los que me conocen saben que amo el color, pero este siempre deberá llevarse de forma balanceada. Esto implica combinarlo con blanco si es un color más llamativo para armonizar el impacto. Además contribuirá en generar una imagen de poder al crear contraste de color.
3. Elegí ropa de tu talla. Insisto mucho en este tema, pero está comprobado que más del 50% de nuestro aspecto puede verse dañado si se usa ropa grande o demasiado ceñida. Si tenés que preocuparte porque tu ropa se sube, porque tu escote se baja demasiado, o porque la manga del saco te incomoda, ya es una señal de que esa ropa solo te hará sentir inseguro.
4. Indagá en el código de vestimenta. El conocimiento nos da seguridad, es mejor preguntar antes de asistir a un evento, cuál es el código de vestimenta si tengo dudas. Consultá a un experto o al anfitrión, esto te dará una guía de cómo ir vestido y te hará sentir bien.
5. En negocios menos es más. Sin duda es una frase que aplica para todo campo, pero en los negocios, entrevistas de trabajo o defensa de tesis, la sobriedad siempre será tu mejor aliado. Quitá todo aquello que sea demasiado extravagante. Siempre accesorios delicados, colores sobrios, tacones con nivel medio.
6. El descuido, tu peor enemigo. Si tu objetivo es generar un impacto positivo y sentirte seguro, no lo lograrás si descuidás tu imagen. Un buen perfume, un excelente aseo personal, el cuidar tus manos, las uñas, y tu rostro así como el cabello, son vitales para mostrar una imagen fresca y cuidada, pero sobre todo estos aspectos te harán sentirte capaz y hablará de tu seguridad y confianza.