La mayoría de personas que me contactan me dicen que se sienten apagadas y sin vida y esto por supuesto afecta sus emociones. El principal problema está en no saber identificar qué es lo que provoca que nuestra imagen luzca apagada y sin estilo. Creemos que solo basta con comprar una pieza a la moda, pero hay algo más, y eso está relacionado con la energía que cada prenda evoca. En imagen existe lo que yo llamo la extensión de la imagen; por lo tanto, si una pieza se ve gastada y deteriorada eso mismo transmitiremos nosotros.
Sin embargo, no solo se trata de la prenda como tal, sino también de todo lo que le acompaña, y esto involucra accesorios, maquillaje, e incluso el lenguaje corporal. No podemos generar una imagen vívida y moderna solo con un buen vestido, es un gran avance claro, pero el éxito dependerá de la combinación de esos elementos.
¡No solo el vestido importa!
A lo largo de mi carrera me he dado a la tarea de determinar cuáles son esas razones por las cuales muchas personas se sienten apagadas y sin estilo. La carencia de luz y energía son la principal razón por la cual una imagen no luce fresca ni radiante. Creemos que basta con un vestido elegante, pero este deja de ser lo que es cuando está mal producido, y con esto no solo me refiero a los zapatos que le complementan sino va más allá, tiene que ver con la forma de caminar, con la actitud de quien lo lleva, el maquillaje que elegimos.
Asimismo, alguien puede verse apagada llevando incluso el vestido más bonito, si este no le queda bien o es de un color que no le favorece. Puede que tengamos buenas intenciones y lo hayamos combinado bien, pero usar prendas que no son apropiadas para nuestra morfología solo nos restará estilo y elegancia. Como vemos, la imagen es integral y por eso se debe de ver como un todo.
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Así que prestá atención a estos errores que he identificado como las principales razones que te hacen ver apagada, ya sea para que evités caer en ellos, o bien para que no volvás a repetirlos:
- Ceño fruncido. Un vestido de diseñador podría no significar nada si quien lo porta está amargado y no sonríe. Eso daña hasta la prenda más cara.
- Cabello maltratado. El cabello es una parte visual muy importante, podría dañar por completo la imagen, quien porta un cabello sin vida también parecerá sin vida.
- Colores que deprimen. Hay colores que según el tipo de piel pueden avejentarnos, hacernos ver sin luz y enfermas. Y ninguno de esos estímulos crea un look vívido y moderno.
- Cara lavada. Una cosa es que use un maquillaje suave y otra que parezca que nos acabamos de levantar, si queremos mostrar una imagen radiante, la cara lavada no es una buena elección.
- Ropa anticuada. Este es un error que veo a diario, no se trata de renovar el armario todos los días, pero sí de tratar de modernizarlo. A menudo veo armarios que tienen años y sus prendas nunca se renuevan., Si una prenda luce vieja así también luciremos.
- Un mal ajuste. Ni lo grande ni lo pequeño, la talla correcta es lo ideal. Las prendas que no son de nuestra talla solo nos restan estilo.
- Hombros caídos. Este diría que es uno de los más importantes, unos hombros caídos podrían hacernos ver lejanas, aburridas y hasta desinteresadas. Nuestra morfología cambia, no es lo mismo el escote de un vestido con los hombros arriba que si los bajamos ¡La postura es fundamental para crear estilo!